TRANSCRIPCIÓN

Corriente Alterna

Segunda Temporada #PodcastCulturaUNAM

Capítulo 1: La estela del abusador: nuevas revelaciones sobre Marcial Maciel

Locución: Emiliano Ruiz Parra

[Sample de voz de Marcial Maciel]: Si me pidieran cualesquier sacrificio, incluso sacrificar la Legión para que la iglesia continuara, yo la sacrificaría. Si la Legión es, es por la Iglesia en tanto que la Iglesia es el Sacramento de Cristo para continuar la redención de los hombres.

[Habla Emiliano Ruiz Parra]: En febrero de 2022, se cumplen 25 años desde que, en 1997, se revelaron los abusos sexuales del sacerdote Marcial Maciel, a quien se consideraba un santo.

Maciel era el fundador de Los Legionarios de Cristo, una congregación religiosa surgida en 1940 en el sótano de una casa de la Ciudad de México. En aquel entonces Maciel tenía sólo 20 años.

[Música de fondo: canto litúrgico ambrosiano]

[Habla Emiliano Ruiz Parra]: Ocho ex legionarios, entre ellos José Barba, dieron su testimonio notariado al periódico The Hartford Courant, un diario de Connecticut, Estados Unidos. ¿Por qué se fueron a Estados Unidos a denunciar? José Barba ha explicado que sabían que en México ningún medio de comunicación los iba a escuchar, que serían censurados por el poder de Maciel. Por eso recurrieron a uno de los diarios más antiguos de la Unión Americana. Su denuncia se publicó ahí el 23 de febrero de 1997.

Los legionarios se atrevieron a denunciar cuando supieron del abuso sexual a un menor de edad en el Instituto Cumbres, abusado por un sacerdote legionario que no era Marcial Maciel. Pensaron que si no hablaban, más niños serían víctimas del abuso y el encubrimiento en la orden religiosa.

Los ocho denunciantes fueron Félix Alarcón, José Antonio Pérez Olvera, Fernando Pérez Olvera, Juan José Baca, Saúl Barrales, Alejandro Espinoza, Arturo Jurado y José Barba.

Rúbrica: Corriente Alterna

[Habla José Barba]: Eh, como he contado, una loca, violenta masturbación que me causó con enorme daño porque el hombre estaba yo creo que drogado y estaba, estaba mal, porque me había pedido que lo masturbara con el pretexto de que tenía dolores en sus partes, eh, viriles. Mi mano se se congeló y él se enojó, me sacó la mano de las sábanas y me regañó diciendo “no sabes hacerlo”.

Desde hace un cuarto de siglo se conocen los testimonios de abusos sexuales, de hecho, la Legión de Cristo tuvo que aceptar que Maciel abusó de al menos 60 menores de edad. Este podcast da respuestas a nuevas preguntas, ¿cómo financió Maciel su emporio religioso? ¿cómo sostuvo su impunidad durante décadas? Se basa en el testimonio de José Barba.

[Música de fondo: ritmo con percusiones digitales]

[Habla Emiliano Ruiz Parra]: José Barba es quizá, de los hombres con la memoria más privilegiada de México. Es capaz de recordar con precisión el día, el mes y el año de acontecimientos que ocurrieron hace siete décadas. Para 1997, cuando se reveló que Maciel era un pederasta, la Legión de Cristo se había convertido en un emporio religioso y financiero. Controlaba colegios privados en países de América y Europa y era propietaria de universidades en México, Estados Unidos, España e Italia.

Marcial Maciel acumulaba propiedades. A los 30 años funda el Colegio Máximo de Roma y a los 32 compró el Gran Hotel de la Familia Cortines, en Ontaneda, España. Lo más interesante es que esta compra la hace en efectivo, al contado y en metálico. ¿De dónde sacaba tanto dinero un sacerdote joven? Era bueno para obtener fortunas de viudas millonarias. Sin embargo, eso no parece suficiente para explicar su abundancia.

[Habla José Barba]: Esto era una realidad que Marcial Maciel supo aprovechar en Roma, facilitando dinero que llevaba adquirido de alguna manera en México, nunca en las cantidades que le hubieran permitido, a los 28 años, fundar un colegio de lujo como el colegio de Via Aurelia 677 en Roma, que está a un paso de Piazza Irnerio, que está a 45 minutos del Vaticano, ¿de dónde salió el dinero?

Entonces, vuelvo al tema de que se va expandiendo la institución en España, ya en ese nuevo dominio comprado con dinero en efectivo como me dijo Gregorio López muchos años después hacia 1984, no me dijo por qué pero sí me dijo que él había ido a pagar con billetes en efectivo la compra de esa propiedad que a partir de 1954, marzo de 1954, fue ya propiedad de los Legionarios de Cristo en el valle de Toranzo, en las montañas de Santander, a una hora aproximadamente del puerto.

[Habla Emiliano Ruiz Parra]: De acuerdo con el testimonio de José Domínguez, Maciel usó a dos jóvenes legionarios para pasar droga a través de la frontera de Francia con España hacia la década de los 50.

[Habla José Barba]: En el año 2004, José Domínguez Moreno en San Diego nos dijo al doctor Jurado y a mí que, ya desde que estaba en la Legión, él que era hijo de guardia o de un capitán de la Guardia Civil Española de Sabadell, en Cataluña, había introducido droga con Carlos de la Isla, pasando caminando de Hendaya a Irún, eh, con bolsas de cocaína, eh, de plástico sujetas entre las piernas y en el estómago al cuerpo con Diurex, desde aquel entonces.

Yo había sido amigo también de su hermano que fue uno de los de, quienes yo supe, que metió droga de Francia a España juntamente con el doctor Carlos de la Isla, por instrucciones de Marcial Maciel, por la frontera de Hendaya-Irún.

[Habla Emiliano Ruiz Parra]: ¿Como hizo Marcial Maciel para garantizar su impunidad? Según José Barba, gracias a que Maciel utilizó los sobornos, el sexo y el espionaje para abrirse paso en el Vaticano con poderosos cardenales y jerarcas católicos.

[Habla José Barba]: Marcial Maciel durante mucho tiempo se sostuvo con tres elementos principales. Yo lo he observado, lo he comentado con compañeros que concuerdan y eran fundamentalmente estos: el soborno, el sexo, el espionaje y los intercambios con personas que estuvieran bien situadas en el Vaticano o con el Vaticano tanto en España como en Chile como en México, en diversos lugares, pero, bien fuera directamente el sexo o a través de presentación y facilitación de legionarios jóvenes que él colocaba.

El que es actualmente presidente del governatorato del Vaticano, Fernando Vérgez, fue legionario. Entró cuando yo salía del Colegio de las montañas en el año 54. Él llegó y él fue puesto con el cardenal Eduardo Pironio porque era un muchacho muy atractivo. Él situaba, yo creo que él observaba las debilidades de esta índole sexual en los personajes del Vaticano. Frédéric Martel, que escribió hace años el libro Sodoma, llegó después de casi 4 años de investigación a la conclusión de que el 80% de los investigados en el Vaticano eran homosexuales. Entonces, Marcial Maciel, yo creo que se adentó mucho observando y colocando a personas que él veía agraciadas, eh, con personajes que tuvieran este tipo de debilidad.

[Habla Emiliano Ruiz Parra]: Marcial Maciel era, sobre todo, un hombre muy poderoso. Presumía su amistad con el papa Juan Pablo II y con el cardenal Angelo Sodano. En México, tenía amistad con grandes empresarios. Él mismo había celebrado, por ejemplo, la boda del magnate Carlos Slim con Soumaya Domit.

¿Qué hubiera pasado si esos 8 ex legionarios hubieran permanecido en silencio? Marcial Maciel estaba preparando su propia canonización. De acuerdo con sus planes, él mismo sería elevado a los altares como San Marcial Maciel.

[Habla José Barba]: Por tanto, creemos que liberamos a la iglesia a tiempo, porque lo más probable que habría sucedido es lo siguiente: que así como gritaron en San Pedro, en la Plaza de San Pedro, “Santo súbito”, Santo rápido a Juan Pablo II, los legionarios se habrían movido para co-canonizar a Marcial Maciel como el gran amigo del Papa Juan Pablo II.

[Habla Emiliano Ruiz Parra]: En 2006, el Vaticano aparentó que actuaba en su contra, le pidió que no celebrara misas en público y lo retiró a una vida de oración y penitencia. Sin embargo Maciel se burló de la sentencia. En compañía de sus amigos, su mujer y su hija —porque sí, tuvo esposas e varios hijos— se fue de vacaciones por Europa a todo lujo.

[Habla José Barba]: No lo juzgó, solamente lo invitaron, con esa expresión, a salirse a hacer meditación y penitencia, lo cual se le puede decir a cualquier pecador. Durante mucho tiempo estuvo con su amante o mujer de las que tenía, con su hija, estuvo en diversos lugares, estuvo en Cancún, estuvo en Madrid, estuvo en Capri, y no obedeció de ninguna manera y el Vaticano nunca dijo “esta boca es mía”.

[Habla Emiliano Ruiz Parra]: ¿Qué papel jugaron los papas ante Marcial Maciel? Según José Barba no hay ninguna duda: tres papas lo encubrieron, en especial Joseph Ratzinger o Benedicto XVI.

[Habla José Barba]: ¿Por qué los papas lo preservaron con su amistad? Lo encubrió Ratzinger; Ratzinger, lo digo delante de todos e históricamente lo sostengo, fue un encubridor a sabiendas. No es una imaginación mía, lo tengo comprobado. Yo fui uno de los dos comandatarios que presentamos el caso en Roma y él ha esquivado, ha tratado de decir que ha hecho, y el Viernes Santo, cerca del Coliseo, dijo que había que lavar la iglesia de toda la inmundicia, sin embargo, él encubrió durante mucho tiempo a Marcial Maciel y solamente se atrevió cuando falleció Juan Pablo II. Entonces, eh, los papas, durante tres pontificados, lo encubrieron.

[Habla Emiliano Ruiz Parra]: La Legión de Cristo sigue siendo un gran emporio religioso, educativo y financiero, aun en el pontificado del papa Francisco. Escuchemos el llamado de José Barba al actual pontífice, el argentino Jorge Bergoglio.

[Habla José Barba]: El Papa Francisco en la entrevista que dio a Valentina Alazraki, enviada a años atrás por Televisa, cuando Valentina Alazraki le preguntó “¿Qué piensas su santidad acerca del padre Marcial Maciel?”, respondió…

[Sample de voz del Papa Francisco]: Cuando me enteré del escandalazo, realmente me dolio mucho, me escandalicé. ¿Cómo esta persona pudo llegar hasta esto? Evidentemente que era una persona muy enferma. Además de todos los abusos, creo que también había dos o tres mujeres de por medio, hijos con una, con otra, no sé y mucha plata. Pero creo que se trataba de un enfermo, de un gran enfermo. El entonces cardenal Ratzinger llevó la cosa adelante, el Papa San Juan Pablo II le dio luz verde para llevarla.

¿Hubo encubrimiento? Uno puede presumir que sí, aunque siempre en justicia hay que presumir la inocencia. Pero sería raro que no tuviera algún padrinito por ahí medio engañado, medio que sospechara y no supiera, eso no lo he investigado.

[Habla José Barba]: A él yo le tendría que decir lo que he dicho en otras ocasiones “Santo Padre, si estaba tan enfermo, ¿por qué durante décadas, muchas décadas, le permitió estar al frente de una institución?

[Habla Emiliano Ruiz Parra]: Desde 1997 José Barba ha emprendido una batalla por la verdad. Hoy, 25 años después, el resultado es ambiguo: se logró desenmascarar a Marcial Maciel y evitar que un pederasta fuera declarado santo de la Iglesia católica. Pero la legión de Cristo como estructura de encubrimiento sigue intocada y manejando recursos millonarios, como lo mostró la reciente filtración que encontró casi 300 millones de dólares escondidos en un paraíso fiscal.

La pederastia clerical y el encubrimiento de la jerarquía católica se han convertido en el escándalo más grave de la Iglesia desde hace tres décadas. Personas como José Barba y otras mujeres y hombres valientes han emprendido una larga batalla por la verdad y los derechos de las infancias a una vida sin violencia.

Rúbrica: Corriente Alterna

[Efecto de sonido]

[FIN DEL PODCAST]

Créditos

Investigación, entrevista y locución: Emiliano Ruiz Parra

Producción y musicalización: Yeudiel Infante

Semblanzas

José Barba nació en Jalisco en 1937. Entró a los Legionarios de Cristo en la pubertad. Sufrió abusos sexuales de Marcial Maciel mientras era seminarista en Ontaneda, España. Dejó la congregación religiosa a los 26 años, sin ordenarse sacerdote, e inició una vida como académico. Obtuvo doctorados en Filología en la Universidad de Harvard y Boston College y fue profesor en la Universidad de Las Américas y en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM). En 1997 fue uno de los 8 ex legionarios que denunciaron públicamente por primera vez los abusos de Maciel ante el diario de Connecticut The Hartford Courant.