A través de sesiones de activación-intervención, La Biblioteca Negra, somete a libros recolectados de diversas procedencias, a un proceso de edición expandida. Este proceso combina investigación, puesta en escena, formación y elaboración de un objeto-cuerpo bibliotecológico previamente distribuido, transformándolo en un objeto vivo y mutable. El proyecto tiene como punto de partida el texto Páginas en negro, de Gabriela Halac, el cual se centra en la edición como práctica forense y en la dimensión telúrica del libro. El texto de Halac plantea una reflexión sobre las representaciones implícitas en las páginas en blanco y se contrapone a las páginas en negro, como una escritura que emerge de procesos vinculados a la tierra. La biblioteca negra se activa en etapas, concibiendo a los libros como objetos escultóricos mutables, y al proceso editorial como una práctica performativa a modo de laboratorio ciudadano que investiga sobre políticas de extracción y supervivencia para imaginar otras formas de producción de libros. La obra aborda la problemática de los excedentes editoriales y propone nuevas formas de entender la materialidad del libro, así como su potencial transformador en distintos espacios culturales.